domingo, 14 de marzo de 2010

VERGONZOSO TRASIEGO POLITICO

07-03-10

Pronunciamiento Político No. 111

Con motivo de las próximas elecciones para Gobernadores, Alcaldes municipales, consejeros departamentales y municipales, hemos podido comprobar cómo se ha desbordado el trasiego político de una manera realmente repulsiva.

Hemos visto a connotados elementos de la derecha incluyendo a la derecha fascista y secesionista de Santa Cruz hacer las “paces” con el MAS e integrarse a algunas de sus filas electorales.

El caso más notorio es el del ucesista Roberto Fernández que tras de sí trae a elementos francamente fascistas como aquella señora que abofeteó, agredió e insultó a un intelectual cruceño por hacer conocer su opinión independiente.

Por otro lado tenemos a furibundos masistas del pasado reciente que, súbitamente y sin ningún reparo, se convierten en virulentos enemigos del MAS, del proceso y del propio Presidente del Estado Plurinacional. Son los casos notorios de Román Loayza y Lino Villca que ahora forman filas en la oposición derechista.

Igualmente observamos con mucha preocupación la política del MSM de recoger a los resentidos del MAS para fortalecer sus exiguas fuerzas en todo en interior del país.

Nuestro Partido revolucionario denuncia estas prácticas como negativas y profundamente reaccionarias, rechazando desde todo punto de vista esas acciones que momentáneamente pueden traducirse en ventajas electorales.

Nuestra posición de principios es completamente contraria a este vergonzoso trasiego político que hace sino lesionar seriamente la confianza de los elementos francamente revolucionarios que ven con desaliento cómo reaccionarios y fascistas son acogidos y premiados por el Gobierno en cargos de alta responsabilidad.

Nuestra crítica franca y sincera no significa, ni mucho menos, un alejamiento del proceso de cambio, por el contrario esos defectos y errores deben servirnos para seguir luchando por la profundización, radicalización y aceleramiento de nuestro proceso de cambio, a pesar de todos los obstáculos propios de una situación procesual como la que vivimos.

PCmlm.

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